Capítulo de Hoy: A la mierda

Ha pasado harta agua debajo del puente. Ha sido un año de mierda. No tenía ganas de seguir escribiendo esta porquería después de la partida del señor Hidalgo. Para que seguir narrando las desventuras de un grupo de amigos que ya ni se juntan para ir al cementerio. No se si lo dije aquí o lo anoté en mi disco duro mental de 512 kilo bites, pero cada vez estoy más convencido de que la amistad es por momentos; que las casualidades de la vida nos juntan con las personas que necesitamos en determinados instantes, para después cada uno seguir su camino. Es triste y fome la gueá pero así es la vida no más pues.
          Puta que pasaron gueas este año. Desde el movimiento estudiantil, pasando por la selección y un nuevo fracaso en la copa américa, la muerte de Camiroaga y compañía y un largo etc.....
Todos estos hechos, podrían haberme dado material para comentar y hacer un poco de ejercicio mental; para que el colilarga que tengo en mi caeza hiciera un poco de ejercicio, aunque sospecho que está harto muerta la porquería desde hace bastante tiempo.
          La razón de escribir nuevamente, viene de la mano de un estado espiritual algo raro. NO TENGO GANAS DE SOCIALIZAR. No se si seré el único perguetano, pero me carga estar rodeado de gente. No es tanpoco parte de un estado de imbécil superioridad que algunas personas sienten, que los hace mirar debajo del hombro a los demás como seres no aptos para gastar palabras. Nunca me he creído por ni una guea; pero por la chucha, hasta cuando toda la gente se comporta de la misma manera. Generalmente el único espacio par intercambiar guevadas con las personas, se dan en los eventos sociales del fin de semana. He ahí mi problema. Puta, no aguanto más que reunón social que se haga esté enmarcada por el putrefacto sonido del reggeaton. No puede ser que un par de hueones encuentre un "temazo" esa gueá del "señor de la noche". No puedo creer que tengas que aguantar esa mierda sonando 2 horas seguidas si te quieres tomar un combinado. No puede ser que a la mayoría de la gente le encante esa guevada.
        No se si me estoy poniéndo paranoico, pero sospecho que esa gueá trasmite ondas sonoras que provocan un grado de manipulación mental en la gente.... no si no estoy gueviendo. La gente está cada vez más hueona. El otro día leí sobre el I - Doser, que consiste en escuchar una serie de ruidos por determinados minutos que les permiten a las persona experimentar sensaciones tales como efectos de drogas y vértigo.....y si el mierdaton funciona con el mismo principio, pero te tranforma en un hueón. pero no un hueón simpático ni gracioso, solamente en un hueón- hueón. Ante esto he tomado la decisión de no sali más los fines de semana, de quedarme encuevado buscando la alegría y distracción en una buena película o un buen disco, esperando que todo lo profetizado sobre el 2012 sea verdad....

No Somos Nada......

Esto parece el final de un libro o el último capítulo de una serie de tv en el que el narrador cierra la etapa de su vida que quería contar. Por la mierda, aún no lo creo. Todo fue tan rápido que aún no lo procesamos..... el sábado mataron a mi hermano.....

Ese mensaje que recibí era tan increíble, tan, no se que chucha que no pude reaccionar. No podía llorar, me sentí inhumano, un hueón cínico que no podía derramar lágrimas. De ahí a tu casa con el resto de los monos. Sólo podíamos hechar tallas que solo nosotros entendíamos. Sólo uno de nosotros se podía dar cuenta de que estábamos hechos mierda... el humor sirve para todo.

La reunión del Sábado en la noche fue extraña, como dijo don chino "el velorio informal". Sé que todos esperábamos que se abriera la puerta de la calle (porque tu, hueón patudo ni siquiera golpeabas) y entraras, y nosotros, por supuesto, te agarráramos pal hueveo. Pero nunca llegaste.

Tu vaso servido te esperaba, aunque se que no con todo el ron que te gustaba. Lo miré por algunos minutos y esperaba que se vaciara, esperaba escuchar tu medley de canciones que tan bien nos sabíamos y cargarnos de la risa por algún cambio de letra que terminara con pico, poto, teta o cacha... pero los versos tuve que terminarlos en mi mente..... mi hermano ya no estaba. Pese a todas las risas y canciones; a las anécdotas que hemos contado ya por 500 veces, no pude dejar de notar que, al callarnos, la amargura se hacía presente. Mori, de tanto en tanto, se tapaba la cara con su bufanda, el Sotelo respiraba ondo, Mayín tenía los ojos vidriosos, mi daniela sollozaba. No me acuerdo cuando se me borró la película, pero subí al segundo piso y me estiré en la cama. Quería llorar pero no podía. En eso, Mayín y Sotelo entran a la pieza, y ahí pudimos desahogarnos. Sé que todo lo que dijimos no fueron sentimientos de curaos hipócritas, sino que de verdaderos amigos, gracias hermanos míos.... Enrique, Sotelo, Maya, Chinin y Danielita....

En tu funeral, no pude dejar de pensar que habrías dicho tú...me cagaba de la risa solo, viendo que lo hiciste de nuevo.... ya tu sabes a que me refiero compadrito moncho....

Eres un personaje, no en el sentido malo de la palabra, sino una de aquellas personas con características tan particulares que no pasan indiferentes. Me acompañaste casi en toda mi vida y le diste humor y alegría. Eras chucheta, mentiroso como tu solo, engrupidor, jaranero y sacador de vuelta..... Pero eras Alexis Hidalgo Hidalgo, mi amigo, mi compadre y mi hermano... eres sólo un Alexis, un Alexis como no habrá otro.......................... Conchesumadre, que te voy a echar de menos....

Capítulo de Hoy: "Adiós Amigo"

Hidalgo... siempre he pensado que todas las personas tenemos un objetivo, algo que justifique nuestro paso por estos lados. Compadre, usted pese a todas las veces que discutimos, que lo retamos como cabro chico, tenía perfectamente claro su aporte, su motivo de vida. En estas ocasiones, en que todos son perfectos y las mejores personas, me tomo la atribución de decir, por la amistad de tantos años que nos une, que es precisamente usted con todos sus defectos y virtudes, una persona que marcó la vida de todos nosotros…

....Gracias por esa alegría, por la talla precisa en el momento en que lo necesitábamos. Por toda esa inmensa cantidad de recuerdos que siempre aparecerán cuando los que quedamos acá nos reunamos y dejemos un espacio para que nos acompañes. Por ser mi compadre en las diferentes etapas de mi vida. Por enseñarme que una discusión pude terminar en cinco minutos porque no todo debe ser tomado tan en serio. Por esas interminables pichangas cuando cabros chicos, que podían ser con hartos amigos, o entre nosotros dos en el patio de mi casa... Gracias hermano por darme la oportunidad de haberte conocido.